Con una altura de 3820 metros –la máxima altitud del territorio costarricense- ofrece una vista panorámica sensacional, en la que se pueden apreciar el volcán Barú; en territorio panameño, los volcanes costarricenses Turrialba, Irazú y Poás, la costa atlántica y amplios sectores de la carretera interamericana.
Desde la cúspide también se pueden apreciar el Cerro Urán, los valles de Los lagos y Las morrenas y los emblemáticos crestones.
Se encuentra a 5.1 kilómetros del albergue de Base Crestones, equivalentes a una caminata moderada de dos horas.